miércoles, 1 de septiembre de 2010

Primer reporte (copy paste del mail 1)

Hola a todos! A punto de cumplir una semana instalada en Seúl (the soul of Asia), finalmente puedo sentarme con tiempo y tranquilidad a contarles cómo nos ha ido hasta ahora.

Las 36 horas de viaje fueron un agote. Partimos el sábado pasado volando 13 horas a Paris, donde el vuelo incluyó a un azafato cantando a capela y aplausos de todos los pasajeros (pueden leer el detalle acá: http://www.zancada.com/y-tu-%C2%BFvives-a-tu-manera/ ). Llegamos a Paris y llovía brígido, así que se fue a las pailas nuestra idea de ir a sacarnos una foto pokemona a la torre Eiffel. En el aeropuerto nos dijeron que no veríamos nada, y no quedó más que quedarnos 9 horas parando el dedo en el aeropuerto. Más encima, la policía francesa nos quitó las botellas de vino que traíamos de regalo así que todo mal con Charles de Gaulle. Hasta que a las 21.00 del domingo partimos en Korean Air, con todas las azafatas iguales. Lo mejor del viaje fue la comida. Un bowl lleno de arroz, un tubito tipo pasta de diente chica, con una salsa mega picante que había que echarle al arroz (nosotros le echamos la mitad no más, y quedó rudo. No sé cómo se comen el tubo entero los Koreanos) y un montón de diferentes tipos de  Ko Sha Yuu Yos  (cochayuyos para que el que no cachó). Al final, las 24 horas sentada en un avión se me pasaron viendo como 3 películas, jugando tetris y quién quiere ser millonario, y durmiendo a ratos.
Llegamos a Seúl el lunes a las 14.00 hora de acá (1.00 am de Chile) y apenas atravesamos la puerta del aeropuerto, vimos un cartel con nuestros nombres. Tuvimos la suerte de contactarnos con la embajada de Chile en Korea, y la esposa del 2do en la embajada (hay embajador nuevo que llegó la semana pasada) nos fue a buscar al aeropuerto. Mega buena onda. Más encima nos había comprado cosas de súpermercado para que nos instaláramos. Se pasó. Así que el otro viernes viene la Marcia con su esposo a comer a nuestro departamento. Estamos urgidos con qué preparar porque no entendemos nada las intrucciones de cómo se cocinan las cosas que venden acá.

Nuestro departamento es súper rico. Es un cuadrado abierto (más o menos del tamaño del living comedor de mi casa en Algarrobo, para quienes la conocen), donde tenemos nuestra cama, una cocina con de todo, lavadero, una mesita de comedor, 2 sofás de 2 cuerpos, una tele, varios closets y el baño. Estamos demasiado cómodos acá. Felices. Lo mejor es que no queda a media cuadra de la estación del metro donde se une la linea 1 (principal) del metro con la 2. Y estamos a 10 minutos en micro de la universidad, y a 4 cuadras de un mega súper mercado.

Como decía, aterrizamos el lunes a las 14.00. Como a las 15.30 llegamos al depto. Y como a las 18.00 nos quedamos dormidos raja hasta el día siguiente. Con un jetlag de 13 horas. Despertamos el martes como a las 5.30 am y teníamos clases a las 9.30. Aprovechamos de acomodarnos, ordenar la ropa en el clóset, etc., y cuando quise abrir mi computador para contestar mails y hablar con gente, caché que se me había quedado el cargador en Chile. Cuec. Recién hoy pude prender mi pc por primera vez.

Hasta que nos dieron las 8.30 y partimos a la universidad. Korea University es INCREIBLE. Está en un cerro tipo Santa Lucía, y cada facultad es una torre de un castillo antiguo. Demasiado bonita. Además con mil vegetación y puentesitos de madera. Y gigante. Todavía no la recorremos entera, porque en total debe ser el triple de San Joaquín. Más encima tiene una especie de mall subterráneo (con tiendas, food garden, etc.) que une las diferentes facultades por debajo del cerro. 

Las clases que tuvimos la semana pasada eran de introducción de finanzas y cálculos y resolución de problemas matemáticos en excell. Los koreanos hablan inglés lento, así que les entendemos casi todo (casi, porque cuando dicen "then go to the light" uno piensa ¿qué luz hay en excell?, y después cachas que están diciendo go to the right). Y en cuanto a los contenidos, igual vimos cosas difíciles (o sea, asumimos que con práctica será fácil), pero al ver la cara de colgados de nuestros compañeros, nos tranquilizamos, porque sabemos que la gran mayoría cachó menos que nosotros. Así que por ese lado, bien.

Hasta ahora hemos conocido como 15 compañeritos. En general en el curso son como 25 koreanos y 18 de otros lados (de los 15 estamos nosotros 2, una mejicana, 1 suizo malo para el fútbol, y todo el resto asiáticos no koreanos). Los asiáticos son ultra amables y respetuosos. Te ofrecen ayuda en todo, se agachan (tipo saludo) cada vez que uno se acerca, pero jamás te tocan. El segundo día de clases se me olvidó eso y me despedí de beso de una compañerita de Kirhistan (o algo así) y la pobre colapsó.
Lo que más me sorprende es el parecido de los koreanos. No de la cara, como la típica talla de son todos iguales, sino de cuerpo. Las koreanas de 14 tienen cuerpo de niña de 14, y las señoras koreanas de 50 también. Con razón en patronato la talla standar es xs. Acá son todas todas todas flacas, de metro 60 y con pechugas 34. Cero posibilidad de que me compre ropa acá. Lo que sí me puedo comprar son lentes. La cagó como el 70% de los koreanos usa anteojos. ¿Será por los ojos chiquititos que no ven?

La comida is the best. Está repleto de lugares para comer. En el casino de la universidad almorzamos por $1200 (pesos chilenos) unos platos gigantes llenos de pulpo, cerdo crispy, algas, arroz y salsas mega picantes. Obviamente todo acompañado de agua muy helada. Acá no se toma bebida. En el súper mercado gigante había un cuarto de estante destinado a las bebidas, y mil espacio para las botellas de agua. En los restaurantes tampoco no venden bebidas. Sólo agua y va incluída. Y absolutamente cero posibilidad de comer un bistec o cualquier pedazo de carne. Simplemente no existe. Yo creo que por eso inventaron comer con palitos y cuchara, porque en su comida no hay nada para cortar.

Sobre lugares, hasta ahora sólo hemos ido a un mall tecnológico de 9 pisos de tiendas de computadores, celulares, plasmas y miles de cosas tecnológicas (donde fuímos a comprar mi cargador), donde lo más freak es que entre las tiendas tecnológicas, había un wedding floor, donde se hacían matrimonios. Acá la gente tiene dos ceremonias, una occidental y otra tradicional koreana (todo matrimonio pasa por las dos). Y el matrimonio tipo occidental es en un mall. Muy freak. De ahí fuimos al cine y vimos Inception: ¡vayan a verla ahora ya!

Y eso es todo lo que hemos hecho hasta ahora. Mañana (lunes) tenemos test de inglés, y el miércoles y jueves nos vamos de paseo de curso fuera de Seúl. Todos nos han advertido que la política en Korea es que "los amigos se hacen tomando", así que al parecer nuestro paseo va a estar rudo. Tengo miedo igual. De ahí les cuento cómo nos fue.

Un abrazo gigante a todos.

Los quiero.

1 comentario:

  1. Joa y Daniel

    No saben lo orgullosos que estamos todos en Chile de saber que estan estudiando allá. Korea es un país que admiro, no sólo por su desarrollo económico, sino tbn por su cultura. Mis amigos Koreanos me hablan siempre de eso, allá la gente es bien social.

    Me imaginé las peripecias allá de ustedes, lo encuentro la raja.
    Tbn me maté de la risa por las tallas, si es verdad que son todos iguales, pero al menos no son tan feos como los chinos.

    Seguiré leyendo para cachar, estaba esperando que escribieran porque la curiosidad me mataba.

    Muchos saludos y abrazos apretados.

    Disfruten!

    Maru

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